Apolo

Antes de nada os comento que he actualizado la entrada del Casa Santa Cruz con una comida a la carta por una fecha especial. Os lo recomiendo para celebrar eventos tipo aniversarios, bautizos y comuniones porque tiene muy buena calidad, presentación y servicio, aunque es caro (salimos a 41 eurazos por persona).

Hoy nos vamos a un bar que lleva abierto ni mas ni menos que desde el año 1969, ¡que se dice pronto! Se trata del bar Apolo:

Es un bar familiar de toda la vida al que nunca había entrado hasta la Ruta de la Tapa, que ganaron el año pasado y éste quedaron finalistas con una tapa curradísima, como podéis ver en la entrada de la Ruta.

Así pues nos animamos a tomar unas cañas y alguna ración en su terraza:

Con el doble de cerveza (2,25€) y el refresco (2,25€) nos pusieron dos panecillos con queso Cabrales, dos con sobrasada con un ligero toque dulce (parecía miel) y snacks un poco picantes. Una tapa razonable. Luego pedimos una ración (adivinad cuál)....... Patatas bravioli, jajaja, aunque no les quedaba ali oli y nos pusieron mayonesa (nos avisaron previamente por supuesto :p).

Y sí, estas patatas tenían algo especial: la salsa brava tradicional, como la del Docamar en Madrid. Es una salsa algo más densa y un poco más picante que la que suelen poner en otros bares, pero está buenísima. El precio era de 6,50€ en la sala y 7€ en la terraza.

Además como ya habréis visto en la foto anterior pedimos también una porción de empanada gallega:

Estaba también muy rica, aunque en realidad es una empanada asturiana porque es de hojaldre y no tiene el color amarillo clásico que le da el pimentón en las empanadas gallegas. El precio era de 3€ en sala y 3,25€ en terraza.

Al poco tiempo se levantó un poco de aire y enseguida vino el camarero a cerrar una parte de la carpa:

La verdad que estuvo muy atento el camarero, y además nos invitó a unos chupitos: uno de hierbas y otro de pacharán:

Otro día fuimos a tomar una caña en la barra:

Con las cañas (1,30€) nos pusieron dos panecillos con queso especiadas y unas galletitas saladas. Por una vez me gustó más la tapa que nos pusieron en la terraza que la de la barra, ¡ya podían poner la tapa de la Ruta de la Tapa!, jejeje.

En resumen, es un bar normal para el tapeo, pero su punto fuerte son las raciones: las bravas y por la pinta que tiene creo que el pescado frito. Además aceptan vales de comida.

La próxima entrada intentaré hacerla en otro barrio que no sea San José de Valderas (que ya es abusar jeje), y también pedir una ración que no sean patatas bravioli, aunque va a ser difícil porque a mi novia le encantan jajaja.

Ubicación: Calle Vicedo, 2, Alcorcón, Madrid, España